domingo, 16 de noviembre de 2025

SISTEMAS DE ACUEDUCTOS DEL MUNICIPIO DE FILANDIA


SISTEMAS DE ACUEDUCTOS DEL MUNICIPIO DE FILANDIA.





El municipio de Filandia cuenta con un sistema de acueductos urbanos y rurales que presentan desafíos y limitaciones en cuanto a capacidad, eficiencia y calidad del agua. A continuación, se presentan los componentes del sistema, los desafíos identificados y las recomendaciones para mejorar la situación.

Componentes del Acueducto Urbano

·                Captación: La captación se realiza en la quebrada Bolillos, con un caudal de 32 L.P.S.

·                Tratamiento: El sistema de tratamiento es de tipo convencional y se encuentra ubicado en la parcelación Lusitania.

·                Almacenamiento: El sistema de almacenamiento cuenta con tres tanques de 1000 M³ de capacidad.

·                Red de distribución: La red de distribución tiene una longitud de 8.733 metros y cuenta con 14 hidrantes y 30 válvulas.

Acueductos Rurales

·                Acueducto Regional: Abastece a 12 veredas y tiene un caudal de 32 L.P.S.

·                Acueducto Portachuelo: Sirve a 35 veredas de los municipios de Filandia, Quimbaya y Montenegro, y tiene un caudal de 92 L.P.S.

·                Otros acueductos rurales: La India, La Palmera, La Cauchera, El Vergel y La Castalia.

Desafíos y Limitaciones

·                Capacidad insuficiente: La estructura primaria del sistema de acueducto fue calculada para abastecer a 12.000 habitantes, pero la demanda actual es de aproximadamente 16.000 habitantes.

·                Pérdidas de agua: Las pérdidas de agua en el sistema superan el 25% del agua tratada.

·                Falta de tratamiento: La mayoría de los acueductos rurales no cuentan con plantas de tratamiento de agua.

·                Calidad del agua: La calidad del agua en algunos acueductos rurales es deficiente.

·                Infraestructura obsoleta: Algunas redes de conducción y distribución tienen más de 40 años de antigüedad y requieren ser reemplazadas.

Recomendaciones

1.              Ampliar la capacidad del sistema de acueducto para satisfacer la demanda actual y futura de la población.

2.              Reducir las pérdidas de agua en la red de distribución.

3.              Implementar plantas de tratamiento de agua en los acueductos rurales.

4.              Mejorar la calidad del agua en los acueductos rurales.

5.              Reemplazar las redes de conducción y distribución obsoletas.

Acciones Prioritarias

1.              Ampliar la capacidad del sistema de acueducto.

2.              Reducir las pérdidas de agua.

3.              Implementar tratamiento de agua en los acueductos rurales.

4.              Mejorar la calidad del agua en los acueductos rurales.

5.              Reemplazar infraestructura obsoleta.

6.              Capacitar a los administradores de los acueductos rurales en la operación y mantenimiento de los sistemas.

Es importante destacar que la implementación de estas recomendaciones requerirá de una inversión significativa y un compromiso a largo plazo para garantizar la sostenibilidad del sistema de abastecimiento de agua en el municipio de Filandia.

COMPONENTES DEL ACUEDUCTO URBANO.

Captación: La captación se realiza en la quebrada Bolillos, con un caudal de 32 L.P.S.

Tratamiento: El sistema de tratamiento es de tipo convencional y se encuentra ubicado en la parcelación Lusitania.

Almacenamiento: El sistema de almacenamiento cuenta con tres tanques de 1000 M³ de capacidad.

Red de distribución: La red de distribución tiene una longitud de 8.733 metros y cuenta con 14 hidrantes y 30 válvulas.

El acueducto urbano abastece a 1.950 usuarios y tiene una cobertura del 100%. Sin embargo, las pérdidas de agua en el sistema superan el 25% del agua tratada.

ACUEDUCTOS RURALES

El municipio de Filandia cuenta con varios acueductos rurales que abastecen a las veredas y corregimientos. A continuación, se presentan algunos de los acueductos rurales más importantes:

Acueducto Regional: Abastece a 12 veredas y tiene un caudal de 32 L.P.S. • Acueducto Portachuelo: Sirve a 35 veredas de los municipios de Filandia, Quimbaya y Montenegro, y tiene un caudal de 92 L.P.S.

Acueducto La India: Abastece a las veredas de La Julia y La India, y tiene un caudal de 3.5 L.P.S.

Acueducto La Palmera: Abastece a la vereda La Palmera y tiene un caudal de 2 L.P.S.

Acueducto La Cauchera: Abastece a la vereda La Cauchera y tiene un caudal de 2 L.P.S.

Acueducto El Vergel: Abastece a la vereda El Vergel y tiene un caudal de 0.95 L.P.S.

Acueducto La Castalia: Abastece a la vereda La Castalia y tiene un caudal de 12.6 L.P.S.

En general, los acueductos rurales funcionan por sistema de gravedad y no cuentan con plantas de tratamiento de agua. La administración de los acueductos rurales se realiza a través de organizaciones comunitarias.

El sistema de abastecimiento de agua en el municipio de Filandia presenta una serie de desafíos y limitaciones que afectan su capacidad de satisfacer la demanda actual y futura de la población.

Capacidad insuficiente: La estructura primaria del sistema de acueducto fue calculada para abastecer a 12.000 habitantes, pero la demanda actual es de aproximadamente 16.000 habitantes, lo que genera un déficit de capacidad. Pérdidas de agua: Las pérdidas de agua en el sistema superan el 25% del agua tratada, lo que indica una falta de eficiencia en la red de distribución.

Falta de tratamiento: La mayoría de los acueductos rurales no cuentan con plantas de tratamiento de agua, lo que pone en riesgo la salud de la población. Calidad del agua: La calidad del agua en algunos acueductos rurales es deficiente, lo que puede afectar la salud de la población.

Infraestructura obsoleta: Algunas redes de conducción y distribución tienen más de 40 años de antigüedad y requieren ser reemplazadas.

SUGERENCIAS.

Ampliar la capacidad del sistema: Se recomienda ampliar la capacidad del sistema de acueducto para satisfacer la demanda actual y futura de la población.

Reducir las pérdidas de agua: Se recomienda implementar un programa de reducción de pérdidas de agua en la red de distribución.

Implementar tratamiento de agua: Se recomienda implementar plantas de tratamiento de agua en los acueductos rurales para garantizar la calidad del agua. Mejorar la calidad del agua: Se recomienda implementar un programa de monitoreo de la calidad del agua en los acueductos rurales.

Reemplazar infraestructura obsoleta: Se recomienda reemplazar las redes de conducción y distribución obsoletas para mejorar la eficiencia del sistema.

ACCIONES PRIORITARIAS.

Ampliar la capacidad del sistema:

Reducir las pérdidas de agua; implementar tratamiento de agua; mejorar el tratamiento del agua; reemplazar infraestructura obsoleta.

Reponer las redes de conducción y distribución en algunos acueductos rurales.

Ampliar la capacidad de los tanques de almacenamiento en algunos acueductos rurales.

Implementar sistemas de tratamiento de agua en los acueductos rurales.

Mejorar la calidad del agua en los acueductos rurales.

Capacitar a los administradores de los acueductos rurales en la operación y mantenimiento de los sistemas.

Es importante destacar que la implementación de estas recomendaciones requerirá de una inversión significativa y un compromiso a largo plazo para garantizar la sostenibilidad del sistema de abastecimiento de agua en el municipio de Filandia.

CONTEXTO HISTORICO.

 

La entidad prestadora del servicio de acueducto en el área Urbana es la La Empresa de servicios Públicos del Quindío EPQ. El acueducto que alimenta la cabecera municipal es tomado de la quebrada Bolillos con un caudal de 32 L.P.S. y surte 1.950 usuarios. Además, se cuenta con tres tanques de almacenamiento de 1000 M³. Este acueducto fue construido en 1.940 con una capacidad de 15 l.p.s., con el fin de abastecer el área urbana del municipio de Filandia. La captación se hace sobre la quebrada Bolillos, exactamente donde la vía Armenia-Pereira, cruza dicha quebrada. Posteriormente las aguas son conducidas hasta el tanque sedimentador, ubicado a 24.0 metros de éste sitio y de aquí hasta la planta de tratamiento, ubicada en la parcelación Lusitania con una longitud total de conducción de 4.180 metros. El sistema de tratamiento es de tipo convencional y se encuentra ubicada en la vía Filandia–Cruces, en la parcelación Lusitania. Dicha planta se construyo en 1.981 para una capacidad de 15 l.p.s., y hasta la fecha no se le han hecho modificaciones tendientes a ampliar su capacidad, el edificio de la planta tiene un área total construida de 103 m2, la cual es utilizada para la operación y depósitode materiales necesarios para su funcionamiento. Las Redes eléctricas que alimentan la planta son de alta tensión y presentan una capacidad de 13.200 voltios, presenta una longitud de 40 ml, con un transformador de 25 KVA. El sistema de Almacenamiento tiene un sistema con capacidad de 1000 m³, distribuidos en tres tanques de concreto reforzado de 400 m³ de capacidad y dos tanques de 600 m³ de capacidad, estos dos últimos construidos en el año de1.985, mediante el programa de Potabilización de Aguas en el Departamento del Quindío. La red de distribución se compone de 8.733 metros de tubería en asbesto-cemento y pvc, con diámetros que varían entre 3/4 y 8 pulgadas. La red de distribución cuenta además con 14 hidrantes ubicados en puntos estratégicos del municipio, de los cuales 3 están en regular estado, además de contar con 30 válvulas para sectorizar la red, de las cuales solo 20 válvulas se encuentran en buen estado, en el momento en que se requiera efectuar reparaciones. En lo que se refiere al estado de la red de distribución la misma ha sido repuesta casi en su totalidad ( 95%), por lo cual se tiene previsto que la reposicion de redes a realizar a partir de este periodo administrativo deben propender por la ampliación de diámetros, caudales y presiones en el sistema. Según Esaquin, el numero de usuarios atendidos en el área Urbana, para el año 2.008, es 1.950 usuarios. La cobertura del sistema es del 100%; las presiones en la red están dentro de los rangos permisibles, las pérdidas de agua en el sistema superan el 25% del agua tratada. 1. ACUEDUCTO RURALPORTACHUELO: El acueducto rural del municipio casi en su totalidad está a cargo del Comité de Cafeteros y de diferentes Juntas Administradoras, y la prestación del servicio se hace a través de varios sistemas de acueductos: Portachuelo, Quebrada La Armenia que abastece la vereda La Cauchera; El acueducto La India abastece las Veredas de La Julia y LA India; Acueducto La Palmera; Acueducto La Cauchera, acueducto El Vergel y Acueducto La Castalia. La mayoría de los acueductos rurales del municipio funcionan bajo el sistema de gravedad no siendo necesaria otra fuente de energía para su abastecimiento ni para su distribución; ninguno de los acueductos rurales posee planta de tratamiento que permita un análisis de la calidad de las aguas, en la mayoría de los acueductos únicamente se trata el agua con sistemas físicos como desarenadores; algunos tratamientos químicos. las fuentes superficiales que van a los acueductos veredales. presentan contaminación bacteriológica con coliformes y de otros microorganismos que hacen del agua una vez mezclada no apta para el consumo humano. El Comité de Cafeteros presta un servicio de acueducto a la zona rural, sistemas de acueductos que se abastecen de las subcuencas de la quebrada Armenia, Quebrada El Bambuco, Quebrada La Gloria, Quebrada Palmichal, Quebrada Barro Blanco, Quebrada Arenales, Quebrada Portachuelo, Quebrada Los Micos o Chisperos y Quebrada la Arenosa. Atiende 23 veredas y 1.132 fincas. Las aguas que son captadas por estos acueductos en zona rural del municipio de Filandia es compartida con los municipios de Montenegro y Quimbaya y no existen mediciones individuales que permitan conocer las cifras por municipio, será necesario entonces, independizar, ajustar, cualificar y caracterizar el servicio a fin de tecnificar el manejo efectivo de las principales cuencas que surten acueductos municipales tanto en su manejo, como en su caudal. En lo referente al abastecimiento de agua en las 24 veredas que conforman el municipio, se han identificado 1472 viviendas potenciales para el suministro de agua; apareciendo una diferencia muy amplia con el número de familias reportadas, 1522, situación explicable porque varias viviendas alojan mas de una familia; el 92% de estos usuarios se sirven de acueductos regionales y veredales, el resto de las viviendas acceden al sistema de fuentes superficiales, arroyos y manantiales, mediante toma directa. En el sistema de abastecimiento por acueducto, el agua llega a las viviendas por tubería; algunos acueductos tienen sistemas de tratamiento y purificación incompleto, relativamente eficiente, todos tienen desarenadores y filtros rústicos como sistemas de tratamiento. Los usuarios que se abastecen de las fuentes directas, según informaciones de algunos habitantes, no cuentan con instalaciones apropiadas para la conducción y distribución del líquido, generalmente utilizan vasijas manuales y algunas mangueras superficiales. A continuación se realiza un listado de los principales acueductos que prestan sus servicios a través de Juntas Administradoras en el área rural municipal: 1. ACUEDUCTO REGIONAL: Recibe su nombre debido a que presta el servicio de acueducto a diferentes veredas de la localidad. Corresponde a un acueducto por gravedad, construido en 1.978, por el INAS (Instituto Nacional de Salud), Comité de cafeteros del Quindío y la Comunidad y rehabilitado por el mismo INAS en 1.981. Tiene como fuente la Quebrada Barro Blanco con asignación de 5.6 l.p.s en verano, mientras que en invierno se ha estimado un caudal de 6.7. l.p.s. Abastece las veredas de Argenzul, Cajones, Santa Teresa, Buenavista, Fachadas, Pativilca, El Congal, Pavas, Bambuco Alto, Bambuco Bajo, La Cauchera y Ramal Cuchilla Alta para un total de 408 usuarios, en 12 veredas. El acueducto es administrado a través de una Junta y los recaudos se hacen según las tarifas estipuladas, aunque estas no son suficientes para subsidiar los gastos de mantenimiento y operación. Presenta un consumo de 11007 metros cúbicos/mes. La captación se hace en la Quebrada Bolillos, mediante bocatoma de fondo, de la que también se toma agua para el acueducto urbano del municipio de Filandia. En total el caudal de diseño para el acueducto regional es de 32 l.p.s. 2. ACUEDUCTO PORTACHUELO: Este acueducto sirve las áreas rurales los municipios de Filandia, Quimbaya y Montenegro, posee 1.650 acometidas domiciliarias, presenta una longitud de conducción de 11.800 ml y una longitud de distribución de 214.400 ml, su caudal es de 92 l.p.s. y sus fuentes son la quebrada Portachuelo con un aforo de 42.6 l.p.s. Las otras fuentes generadoras corresponden a las quebradas El Bambuco, quebrada El Vergel, quebrada La Armenia, quebrada Vargas y quebrada Los Chorros. En toda su extensión beneficia a 35 veredas de los tres municipios, y su infraestructura la constituye una bocatoma de fondo, un desarenador doble, un tanque de almacenamiento, una quiebra de presión, con tubería de conexión entre tanques y tubería de distribución. Además del tanque de almacenamiento principal, el acueducto tiene un sistema de 6 tanques de almacenamiento parciales de 200 m3 cada uno, que funcionan además como tanques de quiebra de presión, los cuales están comunicados entre sí por una tubería de flujo continuo y constante y ramales de abastecimiento partiendo de cada tanque, con flujo variable. 3. ACUEDUCTO QUEBRADA LA ARMENIA - ESCUELA LA PAZ: Este acueducto abastece la vereda la Cauchera, suministra un caudal de 1.5 l.p.s. aforo realizado en el año de 1.998. Su infraestructura está constituida por una bocatoma de captación, la red de conducción de la bocatoma al desarenador está fabricada en tubería de Hf, con una longitud de 180 metros, el desarenador y el tanque de almacenamiento tienen una capacidad de 40 m3. Sobre esta Quebrada se encuentra otra bocatoma que surte a la vereda la Montaña en el Municipio de Quimbaya. 4. ACUEDUCTO LA INDIA: La fuente de este acueducto es la Quebrada Palmichal, Abastece las veredas de La Julia y La India, posee 156 acometidas domiciliarias, con una cobertura de 88.64%, El tanque de almacenamiento tiene un volumen de 80 m3, al cual llega un caudal de 3.5 l.p.s. Este acueducto tiene una inyección adicional del acueducto Regional y otra de la captación nueva de la Quebrada Barro Blanco y los Micos. 5. ACUEDUCTO LA PALMERA: Presenta una captación lateral en dos bocatomas, que se encuentran sobre la quebrada La Plata y la Gloria a 80 metros a la izquierda de la carretera Filandia-La Palmera. Este acueducto posee 48 acometidas domiciliarias y la red de distribución tiene 5.150 metros. 6. ACUEDUCTO LA CAUCHERA: Este acueducto es un ramal del acueducto de Armenia y Portachuelo, sirve al municipio de Filandia, posee 35 acometidas domiciliarias, tiene una conducción de 180 ml y una red de distribución de 4.700ml, con un caudal de 2 l.p.s., su fuente es la quebrada La Armenia y beneficia solamente a una vereda. 7. ACUEDUCTO EL VERGEL: Este acueducto presenta una captación lateral con vertedero de cresta y dos acometidas que se hallan sobre la quebrada La Arenosa, situada en la finca Sierra Morena, con un caudal de 0.95 l.p.s., aforo efectuado en el año de 1.998 y otra acometida sobre la Quebrada Portachuelo. Sirve a la vereda el Vergel y posee 20 acometidas domiciliarias. La red de distribución presenta una longitud de 2.480 ml. 8. ACUEDUCTO LA CASTALIA: Este acueducto fue construido en 1.978 y es administrado por la comunidad, El tratamiento que se le da al agua es el de filtración y desinfección con cloruro férrico; este acueducto abastece 155 usuarios. La bocatoma se encuentra sobre la Quebrada Los Micos, con un aforo de 12.6 l.p.s., y esta bien protegida. Toda la parte del acueducto regional, abastece la vereda de la Lotería y parte de la vereda la Julia, su consumo es de 4.785 M3, para un promedio de 35 l.p.s por usuario. Total Acueductos Rurales del Municipio funcionan por sistema de gravedad. No se realiza análisis de calidad de las aguas a la mayoría de los acueductos. Los acueductos Rurales no poseen planta de Potabilización del Agua. Los Acueductos poseen solo estructura consistente en el desarenador y redes de conducción. Algunos Acueductos realizan un tratamiento preliminar o coloración, en los tanques de almacenamiento. La Administración de los Acueductos en la zona rural se hace en su mayoría a través de organizaciones comunitarias, exceptuando al Acueducto Regional, El Roble y la Julia, La Lotería y la Castalia. En la mayoría de Acueductos se hace necesario la reposición o ampliación de redes, pues las existentes ya han cumplido su vida útil. El porcentaje de cobertura del servicio de acueducto en la zona rural es de aproximadamente el 92%. ACUEDUCTO URBANO Entidad prestadora del servicio Esaquin S.A. Número de Usuarios del Sistema de Acueducto Urbano 1.961 Cobertura de Redes de Acueducto 100% Las redes en su mayoría se encuentran en buen estado Las Adecuaciones a realizar en las redes deben propender por la optimización del sistema, es decir, aumento de caudales y presiones disponibles. Subsidio a las familias de los estratos 1 y 2 en lo que respecta al servicio de Acueducto, siendo beneficiadas en promedio 1.200 familias año. Se hace necesario reponer las redes de conducción, con una longitud de 4.200 metros lineales aproximadamente, que se encuentra en tubería de asbelto cemento de 8 pulgadas.

Por: Álvaro Hernando Camargo Bonilla.

lunes, 10 de noviembre de 2025

CONQUISTA ESPAÑOLA EN EL NUEVO REINO DE GRANADA: PACIFICACIÓN DE LOS PANCHES Y BÚSQUEDA DEL CAMINO DEL QUINDÍO.

CONQUISTA ESPAÑOLA EN EL NUEVO REINO DE GRANADA: PACIFICACIÓN DE LOS PANCHES Y BÚSQUEDA DEL CAMINO DEL QUINDÍO. 





DESCUBRIMIENTO, SOMETIMIENTO Y CONQUISTA DE LAS TIERRAS PIJAO.

La conquista de las tierras de los Panches fue un proceso complejo y multifacético que involucró a varios conquistadores y expediciones a lo largo de varios años.

La del Capitán Fernán Vanegas quien obtuvo y llevó muestras de oro de las minas de la Sabandija, Venadillo y Mariquita. Expedición que despertó el interés de los gobernantes del Reino por conquistar y pacificar la región. Sin embargo, los intentos de Lope Montalvo de Lugo y Pedro de Ursúa, por falta de tiempo de su gobierno y la resistencia de los indios Panches se vieron frustradas.

En 1550, la Real Audiencia comisionó a Andrés López Galarza para pacificar y conquistar los Panches. Galarza salió de Santafé con 93 hombres españoles y se dirigió al Occidente, pasando por los territorios conquistados de la provincia de Tocaima. Luego, cruzó el río Magdalena y comenzó su conquista, enfrentando muchas dificultades y luchas con los indios Panches.

Galarza fundó la ciudad de Ibagué en un valle ameno y deleitoso, con un clima primaveral y un río caudaloso llamado Cuello. La región era rica en metales, incluyendo oro, plata, plomo, estaño, hierro y azogue.

La comarca se caracterizaba de clima agradable, abundante en aguas, tierras fértiles y adecuada para la agricultura, y abundancia de metales (oro, plata, plomo, estaño, hierro y azogue)

 

La expedición de Galarza buscaba establecer una ruta segura y directa entre Ibagué y Cartago, facilitando la comunicación y el comercio entre estas dos gobernaciones. Sin embargo, la conquista de las tierras de los Panches fue un proceso difícil y sangriento, marcado por la resistencia de los indígenas y la violencia de los españoles.

Participaron en la Expedición:

Capitán Juan Bretón

Francisco de Trexo

Pedro Gallego

Juan de Mendoza de Arteaga

Pedro de Salcedo

Diego López

Domingo Cuello

Gaspar Taberna

Miguel de Oviedo

Bartolomé Talaverano

Marcos García

Miguel de Espinosa

La conquista española en el Nuevo Reino de Granada estuvo marcada por numerosos conflictos y desafíos. Uno de los episodios más significativos fue la pacificación de los panches y la búsqueda del camino del Quindío, liderada por el capitán Andrés López de Galarza. Este proceso no solo implicó la expansión territorial española sino también el enfrentamiento con grupos indígenas como los Pijao, quienes ofrecieron una resistencia tenaz.

PACIFICACIÓN DE LOS PANCHES.



Galarza fue comisionado por la Audiencia Real y Chancillería del Nuevo Reino de Granada para pacificar y poblar el valle de las Lanzas y otros territorios entre Tocaima y Cartago. Su objetivo era establecer un camino seguro que facilitara la comunicación y el comercio entre las gobernaciones de Santafé y Popayán, evitando el peligroso rodeo por Neiva y Timaná. Galarza juntó 93 hombres españoles y un sacerdote, y antes de partir, se reconocieron ante el alcalde de Santafé para asegurar que todos iban voluntariamente.

Durante su avance, Galarza promulgó ordenanzas para el buen gobierno de su gente, prohibiendo abusos contra los naturales y prometiendo castigar cualquier daño. En Metaima, los indios inicialmente prepararon una emboscada, pero al ver la determinación de los españoles, optaron por ofrecer comida y guías. Galarza aprovechó estas oportunidades para hablarles de la fe católica y la intención de establecer una relación pacífica bajo la corona española.

BÚSQUEDA DEL CAMINO DEL QUINDÍO.



Después de Metaima, Galarza continuó hacia Ibagué, enfrentando desafíos como el cruce del río Tolima. Los españoles lograron cruzar con la ayuda de sus caballos y enfrentaron resistencia en el valle de Anaima. Galarza intentó mantener la paz ofreciendo requerimientos y protestaciones. Un incidente notable fue cuando un soldado cayó en una trampa de los indios, pero salió ileso.

RESISTENCIA PIJAO CONTRA LA CONQUISTA ESPAÑOLA.




La llegada de los españoles a tierras Pijao marcó el inicio de una era de conflicto y resistencia para los indígenas. Los Pijao se dividían en dos grandes grupos enemistados entre sí, lo que los españoles supieron aprovechar para establecer alianzas y combatir a los grupos más hostiles. La resistencia Pijao llevó a los españoles a buscar estrategias más contundentes para consolidar la conquista.

GUERRA ENTRE PIJAOS Y ESPAÑOLES.

Una historia o leyenda que debe recordarse.

Muchas tribus que existían en la región tenían odios y muertes recónditos. Cuando fuertes guerreros con sus largas lanzas y espadas afiladas de acero, que cortaban con facilidad, se enfrentaron a ellos, que tenían que luchar lenta y con sus hachas de sílice o con la espada. Esos hombres barbados los hacían casi de un solo golpe con una afilada espada. Todos estos detalles los llenaban de admiración.

Aparecían a todo lo largo de la cordillera Grande, limitada por las sierras altas donde el agua se volvía cristalina y la lluvia se transformaba en blancas motas de algodón, que todo lo cubrían con un manto puro y sagrado.

Ellos no se dejarían mancillar por esos hombres sucios que envolvían sus pies en cueros de animales desconocidos.

Los españoles ya los conocían, habían aparecido por el Quindío, por el Tacurumbi y por la gran planada del río Zegues, conformando una poderosa unidad de numerosas tribus comandadas por el gran cacique Calarcá. Ya habían atacado varias veces a Cartago, situado en los dominios del cacique Consota; también se habían unido a los agresores, los indios del otro lado del río Cauca, Calimas y Chocoes, por la sierra donde se pone el sol y donde abundaba el metal amarillo que ellos trabajaban tan bellamente para adornar a sus mujeres y a sus caciques con narigueras, pectorales, aretes, brazaletes y tobilleras, que los bárbaros blancos les arrebataban y aplastaban contra el suelo con sus tacones para transportar, más fácilmente, el oro que tanto codiciaban.

Estos guerreros inconquistables del lado oriental de la Cordillera Grande, también aparecían más allá de donde terminaba el país Quimbaya, que los españoles denominaban con el nombre de río Zegues.  Allí, en ese otro río, estaban los Bugas feroces y en plan de guerra, quienes no permitían camino, ni tránsito, ni tráfico por su territorio. Tan grave fue que en muchos años los españoles no tuvieron ninguna acción por este lado de la gran planicie, a sabiendas de que eran tierras fértiles de labranza, pródigas en frutos.

Estos inconquistables sostuvieron sus dominios desde 1540 hasta 1603; habían interrumpido comunicaciones con Santa Fe, Cali, Popayán, y con las nuevas, que ya se habían descubierto en el estado de Antioquia, hasta llegar al Valle de Ebéjico, donde el Mariscal Robledo había fundado Santa Fe de Antioquia. Las poblaciones de Buga, Toro, Cartago, Ibagué, se veían asediadas constantemente por los ataques imprevistos de los Pijaos, que sembraban desolación y muerte. El clamor ante la Audiencia de Santa Fe fue constante, pidiendo desesperada protección.

En 1605 llegó de España una figura prominente por su preclaro abolengo y altos méritos como militar: don Juan de Borja. Era, don Juan, Caballero de la Orden de Santiago, sobrino-nieto del Duque de Gandia, el gran San Francisco de Borja. Don Juan era un valiente militar con experiencia en serias contiendas en el viejo continente. Al Nuevo Reino de Granada llegó con los títulos de presidente y Capitán.

Se presentaba por aquel entonces aquella guerra de devastación y muerte declarada contra los Castellanos, que se hizo sentir más intensa y asoladora hacia finales del siglo XVI. Se trataba de la guerra de los Pijaos bajo la experta y astuta dirección del temible cacique Calarcá.

Don Juan resolvió afrontar el reto con toda decisión y, una vez que se hizo cargo del gobierno, empezó a organizar sus ejércitos para combatir definitivamente a los belicosos Pijaos. Tuvo la suerte de encontrar en este mismo territorio y, del lado oriental de la cordillera, el apoyo de los indios Coyaimas y Natagaimas; al frente de estos aguerridos guerreros se encontraba el valeroso cacique Baltazar, quien conocía el terreno y la estrategia guerrera de los Pijaos, que consistía en el ataque masivo en el momento más inesperado y el retiro estratégico cuando las circunstancias lo exigían. Se ocultaban en recónditos rincones y en escarpados cerros, perdidos en montañas inaccesibles.

Baltazar conocía todos estos vericuetos andinos; a estos conocimientos agregaba las tácticas guerreras que había aprendido de los españoles: manejo de la lanza y la ballesta, formas de ataque y defensa de los peninsulares. En esta larga e implacable lucha, diezmaron a los bárbaros Pijaos. Volvió la paz, se establecieron nuevamente las comunicaciones entre Cartago y Santa Fe, Cartago y Popayán, Cartago y Santa Ana de los Caballeros y, con los nuevos pueblos de la provincia de Antioquia que llegaban hasta la recién fundada Santa Fe de Antioquia en el Valle de Ebéjico.

El cacique Calarcá, ese guerrero por excelencia que había combatido a los castellanos por tantos años, comprometiendo seriamente la integridad de la Nueva Granada, cuyos dominios estaban amojonados majestuosamente desde el bello y cónico nevado del Tolima, hasta el resquebrajado y cristalino Cumanday (hoy el Ruiz), iba a encontrarse cara a cara después de muchos años de constante persecución, con su temible enemigo: Baltazar el de la temible lanza. Salió Calarcá de su escondite andino al encuentro de su implacable enemigo. Arremetió violento Baltazar. Su lanza partió en dos el corazón del más temible y osado enemigo que hubieran tenido los conquistadores.

LA CAMPAÑA DE JUAN DE BORJA.



En 1605, Juan de Borja fue nombrado presidente, gobernador y capitán general de la Real Audiencia de Santafé de Bogotá. Borja organizó un ejército y emprendió una campaña contra los Pijao en 1607, que incluyó batallas en el valle del río Magdalena y la provincia de Amoyá. La conquista española tuvo un impacto devastador en la población Pijao, llevando a la disminución de la población y la pérdida de su territorio.

LA CONQUISTA Y EL CAMINO.



Galarza fundó Ibagué el 14 de octubre de 1550 y salió a descubrir la Provincia de Toche. La Real Audiencia comisionó a Galarza para explorar y fundar un pueblo que estableciera un camino para comunicar los pueblos del Nuevo Reino con los de la gobernación de Popayán. El cacique Bombo informó a Galarza sobre la existencia de un camino que permitía llegar a Cartago, lo que llevó a Galarza a enviar soldados a verificar la información.

El Camino a Cartago

Los soldados ascendieron a la cordillera y confirmaron la existencia del camino. Galarza decidió regresar con la intención de fundar un pueblo en el año 1550. Después de la fundación de Ibagué, Galarza partió hacia la provincia de Toche para explorarla. Sin embargo, dos soldados enviados a inspeccionar los terrenos fueron asesinados por los indios, lo que llevó a Galarza a lanzar un ataque sin piedad contra los indígenas.

La conquista española en el Nuevo Reino de Granada estuvo marcada por la violencia y la resistencia indígena. La búsqueda del camino del Quindío y la pacificación de los panches fueron procesos complejos que implicaron enfrentamientos y alianzas con grupos indígenas. Aunque la conquista española tuvo un impacto devastador en la población Pijao, su legado sigue siendo importante en la historia de la región.

 

El capitán Andrés López de Galarza jugó un papel crucial en la pacificación de los panches y la búsqueda del camino del Quindío.

Pacificación de los Panches.

López de Galarza fue comisionado por la Audiencia Real y Chancillería del Nuevo Reino de Granada para pacificar y poblar el valle de las Lanzas y otros indios entre Tocaima y Cartago. Su objetivo era buscar un camino seguro que facilitara la comunicación y el comercio entre las gobernaciones de Santafé y Popayán, evitando el largo y peligroso rodeo por Neiva y Timaná.

Galarza juntó 93 hombres españoles, incluyendo 40 de a caballo, y un sacerdote llamado Francisco González Candis. Antes de partir, se reconocieron ante Juan de Avellaneda, alcalde de Santafé, que todos iban voluntariamente.

Galarza y su gente llegaron al valle de las Lanzas (Combayma) sin incidentes notables. Allí, promulgó ordenanzas para el buen gobierno de su gente, prohibiendo faltas públicas, blasfemias y abusos contra los naturales. Prometió castigar cualquier fuerza o daño a los indios.

En Metaima, los indios inicialmente prepararon una emboscada, pero al ver la preparación y determinación de los españoles, optaron por ofrecer comida y guías. Galarza aprovechó estas oportunidades para hablarles de la fe católica y la intención de establecer una relación pacífica bajo la corona española.

BÚSQUEDA DEL CAMINO DEL QUINDÍO.



Después de Metaima, Galarza continuó hacia Ibagué, enfrentando desafíos como el cruce del río Tolima, donde los indios habían destruido las puentes. Los españoles lograron cruzar con la ayuda de sus caballos.

En el valle de Anaima, los españoles enfrentaron resistencia, pero Galarza intentó mantener la paz ofreciendo requerimientos y protestaciones. Un incidente notable fue cuando un soldado, Juan Ortiz de Zárate, cayó en una trampa de los indios, pero salió ileso.

Galarza recibió información sobre la existencia de naturales en Buga la grande y los gorrones que servían a Cali, lo cual sugiere que su expedición también tenía objetivos de exploración y reconocimiento de territorios más allá de la pacificación de los panches.

 

RESISTENCIA PIJAO CONTRA LA CONQUISTA ESPAÑOLA.



La llegada de los españoles a tierras Pijao marcó el inicio de una era de conflicto y resistencia para los indígenas. Los Pijao se dividían en dos grandes grupos enemistados entre sí: los de la sierra y los del llano. Los españoles supieron aprovechar esta división para establecer alianzas con los del llano y combatir a los de la sierra.

ORGANIZACIÓN SOCIAL Y MILITAR DE LOS PIJAO.



Los Pijao se organizaban en asociaciones tribales y elegían un jefe guerrero. Uno de los más destacados fue Calarcá, líder de la confederación de tribus de Otaima, Cacataima, Mola, Anaytoma y Amoyá. Los Pijao mantuvieron una constante lucha contra los españoles, utilizando tácticas de guerrilla y emboscadas sorpresivas en los bosques.

LA CAMPAÑA DE JUAN DE BORJA.

La resistencia Pijao llevó a los españoles a buscar estrategias más contundentes para consolidar la conquista. En 1605, Juan de Borja fue nombrado presidente, gobernador y capitán general de la Real Audiencia de Santafé de Bogotá. Borja organizó un ejército y emprendió una campaña contra los Pijao en 1607. La campaña incluyó batallas en el valle del río Magdalena y la provincia de Amoyá.

CONSECUENCIAS DE LA CONQUISTA.

La conquista española tuvo un impacto devastador en la población Pijao. La violencia y la explotación llevaron a la disminución de la población y la pérdida de su territorio. La resistencia Pijao, aunque valiente y determinada, no pudo evitar la conquista española.

La Cédula Real que comisionó a Juan de Borja para la guerra contra los Pijao es un documento importante que refleja la preocupación de la Corona española por la situación en la región. En él se describe la situación de violencia y peligro que vivían los españoles y se ordena a Borja tomar medidas para pacificar y sujetar a los Pijao.

La resistencia Pijao contra la conquista española fue una lucha valiente y determinada que se enfrentó a la violencia y la explotación de los españoles. Aunque no pudieron evitar la conquista, su legado sigue siendo importante en la historia de la región.

 

LA CONQUISTA Y EL CAMINO.

Andrés López de Galarza, por encargo de la Real Audiencia de Santafé fundó a Ibagué el 14 de octubre del año 1550. Después de su fundación, Galarza salió a descubrir la Provincia de Toche, también escrita Tocha, pasando luego a la provincia de Tocina, situada junto al nevado.

“Había entre la ciudad de Tocaima, del Nuevo Reino, y la villa de Cartago, de la gobernación de Popayán, ciertas poblazones y valles de indios muy belicosos y guerreros que impedían la travesar y pasar de un pueblo a otro y de una gobernación a otra por breve camino, y causaban que los viandantes y la comunicación y comercio de estas dos gobernaciones fuese por partes y caminos muy largos y ásperos y malos, llevando la derrota por los pueblos de Neiva y Timaná, por donde se pasaba un muy largo y despoblado páramo, tan frío y perjudicial que en él se helaban y perecían muchas personas de las que habían de andar esta jornada; y demás de esto y de la aspereza y maleza de este camino, se hacía un grande rodeo de muchas leguas, que doblaba el trabajo a los que lo caminaban su grande longura”.

Los combativos Pijaos impedían el tráfico por el breve camino que comunicaba a Santafé con la gobernación de Popayán, por la montaña del Quindío. Ante éste impedimento, debían cruzar por un largo, frio, y despoblado páramo (Guanacas), donde se congelaban y morían muchas personas y sus caballerías. Camino áspero y malo, que ostentaba gran distancia, pasando por Neiva y Timaná.

Esta circunstancia hizo que la Real Audiencia comisionara a Galarza para explorar y fundar un pueblo y estableciera un camino para comunicar los pueblos del Nuevo Reino con los de la gobernación de Popayán.

 

EL CACIQUE BOMBO Y EL CAMINO A CARTAGO

El cacique Bombo informó a Galarza sobre la existencia de un camino que permitía llegar a Cartago, al otro lado de la cordillera. Para verificar la información proporcionada por Bombo, Galarza envió a algunos soldados a la cima de la sierra con el fin de confirmar lo dicho por el cacique. Les ordenó que, una vez comprobado, regresaran sin avanzar más allá para informarle sobre los detalles y decidir el curso de acción más conveniente.

Los soldados ascendieron a la cordillera y, basándose en información proporcionada por algunos indígenas, estimaron que estaban cerca de Cali y Bugalagrande, en la gobernación de Popayán. Con esta información, regresaron para informar a Galarza, quien decidió regresar con la intención de fundar un pueblo (el primitivo Ibagué) en el año 1550. Después de la fundación, y a petición de sus soldados, Galarza partió hacia la provincia de Toche para explorarla. Al llegar, encontró abundancia de alimentos almacenados por los naturales y descansó con su gente durante algunos días.

Durante su estadía, Galarza envió a dos soldados, llamados Ricardo y Hoyos, para que inspeccionaran los terrenos de una sierra y descubrieran lo que había en ellos. Sin embargo, los comisionados, llenos de codicia, se desviaron del camino y destino indicado por Galarza, yendo a ranchar en unos pueblos de indios ubicados en un valle denominado "Toche", antes de llegar a la sierra.

En su recorrido, fueron sorprendidos por los indios, quienes les dieron muerte y les desollaron los rostros, una práctica habitual entre ellos para utilizarlos como máscaras en sus bailes y rituales. Una vez conocida la suerte y el daño que los indios habían causado, Andrés López de Galarza decidió regresar a Ibagué para preparar más armas, municiones y soldados. Su objetivo era volver a Toche y castigar a sus habitantes por el atrevimiento y el daño que habían hecho.

Al regresar Galarza a Toche, lanzó un ataque sin piedad contra los indígenas, resultando en la muerte de más de cuatrocientos de ellos, según algunas fuentes. Después de esta masacre, Galarza y su gente se dirigieron a otra provincia llamada Tocina, ubicada junto al nevado, y la pacificaron. Posteriormente, regresaron a Ibagué sin haber sufrido daños significativos

En 1553, Melchor de Valdés, capitán español enviado para auxiliar a Galarza del asedio de los Pijaos comandados por los caciques Titamo y Quicuyma, encontró un camino que usaban los nativos para remontar la cordillera. Este camino indígena se denominó camino del Quindío y comunicaba Ibagué con Cartago. Sin embargo, el conquistador Galarza entró en conflicto con Melchor Valdés, motivo por el cual se devolvió a Santafé, mientras que Valdés se dedicó a explotar el camino.

Este rico español ordena los trabajos de ampliación del recién descubierto camino del Quindío dejándolo transitable para animales de carga y acortando el viaje de Santafé a Popayán en veinte días. En honor le asignó el nombre de Valdesina al distrito que se debía fundar en Toche.

miércoles, 29 de octubre de 2025

A COLONIZACIÓN DE LA HOYA DEL QUINDÍO: UN PROCESO COMPLEJO Y MULTIFACÉTICO.

 








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A COLONIZACIÓN DE LA HOYA DEL QUINDÍO: UN PROCESO COMPLEJO Y MULTIFACÉTICO.

La región del Paisaje Cultural Cafetero de Colombia, ubicada en la zona andina, fue escenario de un proceso de colonización que involucró la interacción de diversos actores y factores. Este proceso, que se inició en el siglo XVIII y se prolongó hasta bien entrado el siglo XX, estuvo marcado por la búsqueda de tierras, recursos naturales y oportunidades económicas.

Causas de la Colonización

La colonización de la "Hoya del Quindío" se debió a varias causas, entre ellas la presión demográfica en el altiplano del Oriente antioqueño, que llevó a la búsqueda de tierras baldías y oportunidades económicas. Además, la mala calidad de los suelos y la pobreza en la región de origen también incentivaron la migración hacia el sur.

CONCESIONES Y CONFLICTOS.

Durante este proceso, se otorgaron varias concesiones de tierras a individuos y empresas. Algunas de las más destacadas fueron:

Concesión Villegas: otorgada a Felipe de Villegas y Córdoba, se extendía en una longitud de cerca de cuarenta kilómetros al sur de Medellín, hacia el río Arma.

Concesión Aránzazu: otorgada a Juan de Dios Aránzazu, abarcaba desde el río Pácora hasta el río Pozo y ocasionó uno de los conflictos agrarios más graves del país.

Concesión Burila: constituida por la Sociedad Anónima de Burila, obtuvo una concesión de más de 125 mil hectáreas de tierra, lo que generó grandes conflictos con los colonos que ya habitaban esas tierras.

LA BURILA.

La sociedad Burila, constituida en 1884 por un grupo de accionistas influyentes, se apoderó y reclamó derechos sobre un vasto territorio que incluía varios municipios actuales del Quindío y Valle del Cauca. Sin embargo, su accionar generó conflictos con los colonos, quienes fueron objeto de desalojos y violencia.

PROTAGONISTAS Y SU PARTICIPACIÓN.

Entre los protagonistas destacados se encuentran:

Fermín López: reconocido como el gestor de la colonización, fundó Santa Rosa de Cabal y trazó la ruta para la fundación de otras poblaciones.

Felipe de Villegas y Córdoba: español que obtuvo una concesión de tierra en el sur de Antioquia y norte de Caldas, conocida como la "Concesión Villegas".

Juan de Dios Aránzazu: obtuvo una capitulación real y una extensa concesión de tierras.

Tomás y Heraclio Uribe Uribe: reconocidos defensores de los colonos en los conflictos contra la Compañía de Burila.

Catarino Cardona: abogado que asumió la defensa de los colonos ante la compañía Burila.

ECONOMÍA Y COLONIZACIÓN.

La colonización estuvo estrechamente ligada a la economía de la región. La guaquería, la minería y la agricultura fueron algunas de las actividades económicas que se desarrollaron. El café se convirtió en un producto clave para la economía regional y permitió la consolidación de la colonización.

En resumen, la colonización de la "Hoya del Quindío" fue un proceso complejo y multifacético que involucró la interacción de diversos actores y factores. La comprensión de este proceso es fundamental para entender la historia y la cultura de la región. 

LA COLONIZACIÓN DE “LA HOYA DEL QUINDÍO.

 


La región conocidacomo Paisaje Cultural Cafetero de Colombia, ubicada en la zona andina, fue escenario de un proceso de colonización complejo y multifacético que involucró la interacción de diversos actores y factores. Este proceso, que se inició en el siglo XVIII y se prolongó hasta bien entrado el siglo XX, estuvo marcado por la búsqueda de tierras, recursos naturales y oportunidades económicas.

Causas de la Colonización

La colonización de la "Hoya del Quindío" fue un proceso complejo que involucró la interacción de diversos actores y factores. Aunque estuvo marcada por conflictos y violencia, también permitió la creación de nuevas oportunidades económicas y la consolidación de una región próspera. La comprensión de este proceso es fundamental para entender la historia y la cultura de la región.

 

La colonización se debió a varias causas, entre ellas la presión demográfica en el altiplano del Oriente antioqueño, que llevó a la búsqueda de tierras baldías y oportunidades económicas. Además, la mala calidad de los suelos y la pobreza en la región de origen también incentivaron la migración hacia el sur.

CONCESIONES Y CONFLICTOS

Durante este proceso, se otorgaron varias concesiones de tierras a individuos y empresas. Una de las más destacadas fue la Concesión Aránzazu, otorgada a Juan de Dios Aránzazu en 1824. Sin embargo, estas concesiones generaron conflictos con los colonos pobres que buscaban parcelas para cultivar. La Compañía González y Salazar, que administraba la Concesión Aránzazu, se enfrentó a los colonos en un pleito que se prolongó durante décadas.

LA BURILA

En la denominada "Hoya del Quindío", se destacó la sociedad Burila, constituida en 1884 por un grupo de accionistas influyentes. Esta concesión se apoderó y reclamó derechos sobre un vasto territorio que incluía varios municipios actuales del Quindío y Valle del Cauca. Sin embargo, su accionar generó conflictos con los colonos, quienes fueron objeto de desalojos y violencia.

La colonización estuvo estrechamente ligada a la economía de la región. La guaquería, la minería y la agricultura fueron algunas de las actividades económicas que se desarrollaron. El café se convirtió en un producto clave para la economía regional y permitió la consolidación de la colonización.

HISTÓRICAS CONCESIONES.

Se destacaron tres grandes concesiones en la colonización de la "Hoya del Quindío":

Concesión Villegas: otorgada a Felipe de Villegas y Córdoba, se extendía en una longitud de cerca de cuarenta kilómetros al sur de Medellín, hacia el río Arma.

Concesión Aránzazu: otorgada a Juan de Dios Aránzazu, abarcaba desde el río Pácora hasta el río Pozo y ocasionó uno de los conflictos agrarios más graves del país.

Concesión Burila: constituida por la Sociedad Anónima de Burila, obtuvo una concesión de más de 125 mil hectáreas de tierra, lo que generó grandes conflictos con los colonos que ya habitaban esas tierras.

PROTAGONISTAS Y SU PARTICIPACIÓN.

Entre los protagonistas destacados se encuentran:

Fermín López: reconocido como el gestor de la colonización, fundó Santa Rosa de Cabal y trazó la ruta para la fundación de otras poblaciones. Salió de Sonsón y se trasladó a Sabanalarga (hoy Salamina).

Fermín López se destacó en la fundación de varias poblaciones, incluyendo Santa Rosa de Cabal. López se trasladó a la Municipalidad del Quindío, en el Estado Soberano del Cauca, y solicitó permiso para fundar un pueblo en las inmediaciones del camino que comunicaba Antioquia y Cauca. Inicialmente, el pueblo se denominó Cabal, y posteriormente se le adicionó el nombre de Santa Rosa, quedando como Santa Rosa de Cabal en el año 1843. Además, trazó la ruta para la fundación de otras poblaciones como Filadelfia, Neira, Manizales, Villamaría, Aránzazu y Palestina. Exploró y colonizó tierras en la región, incluyendo el traslado de su parentela a sitios como Sabanalarga (hoy Salamina) y San Cancio en Manizales. Fermín López fue una figura clave en la colonización y desarrollo de la región del Quindío y Risaralda en el siglo XIX.

Felipe de Villegas y Córdoba: español nacido en 1714 en Revilla del Campo, Burgos, España. Obtuvo una concesión de tierra en el sur de Antioquia y norte de Caldas, conocida como la "Concesión Villegas". Propuso la construcción de un camino que uniera Rionegro con la región de Honda y posteriormente con Bogotá, lo que facilitaría el comercio y la comunicación entre estas zonas. Falleció en Rionegro en 1800. Su obra fue fundamental para la colonización antioqueña y el desarrollo de la región

 

Juan de Dios Aránzazu González fue hijo de José María de Aránzazu, un rico empresario criollo de origen español. José María de Aránzazu era un caballero español oriundo de las provincias vascongadas, quien recibió una merced del rey Carlos IV. Juan de Dios Aránzazu, por su parte, obtuvo una capitulación real y una extensa concesión de tierras"Tomás y Heraclio Uribe Uribe: reconocidos defensores de los colonos en los conflictos contra la Compañía de Burila.

Juan Vélez de Rivero: solicitó y obtuvo una parte de las montañas en 1700.

Esteban Arango: yerno del Capitán Juan Vélez de Rivero, a quien le fueron donadas las tierras.

Familia Caicedo: socios mayoritarios de la Sociedad Anónima de Burila, establecida en Manizales.

Los colonos: personas que llegaron a la región en busca de tierras y oportunidades, y que entraron en conflicto con las empresas colonizadoras y los grandes propietarios.

Tomás y Heraclio Uribe Uribe: hermanos del general Rafael Uribe, reconocidos defensores de los colonos.

Catarino Cardona: abogado que asumió la defensa de los colonos ante la compañía Burila.

Los hermanos Caicedo (Lisandro y Belisario): propietarios de la hacienda Burila y de grandes extensiones de tierra en la región.

Manuel M. Gonzales, Simón López y Marcelino Arango: representantes de la Sociedad Anónima de Burila.

Estos personajes jugaron un papel importante en la colonización y la disputa por la tierra en la región del Quindío y Risaralda.