La Nación y las entidades territoriales están en la obligación de reconocer los bienes considerados como patrimonio cultural, igualmente reglamentar lo relativo a su protección.
El camino del Quindío que permitió la comunicación de Santafé con las poblaciones asentadas a las riveras del río Cauca, es un sendero agonizante que yace sobre los costados montañosos de la cordillera Central.
Fue paso importante de viandantes Indígenas, españoles, criollos y mestizos, que lo recorrieron de oriente a occidente y viceversa, en su transcurso histórico, incluso, hasta las dos primeras décadas del siglo XX. Los vestigios que aún existen, constituyen un legado patrimonial que se debe reconocer, recuperar y conservar.
Alcalá, en el Valle del Cauca; Filandia y Salento en el Quindío, son resultado histórico del poblamiento suscitado sobre la ruta. Fundaciones que sintetizan y revelan valores históricos, estéticos y simbólicos, que confirman al camino como bien de interés patrimonial, que requiere cuanto antes de su salvaguardia, protección, recuperación, conservación, sostenibilidad y divulgación, (Artículo 5° de la ley 1185 de 2008).
Rescatar los tramos que aún existen y ponerlos en escena, constituirá una oportunidad para el turismo cultural. La historia contenida es alta y desconocida, especialmente por los habitantes de las grandes selvas de cemento, que abrazados por la azarosa maraña tecnológica, no les permite observar propuestas turísticas culturales.
Los tramos urbanos y rurales que aún existen, una vez rehabilitarlos, podrían funcionar como alamedas peatonales interpretativas de carácter histórico-cultural y ambiental, donde se revele y se exhiban iconos relativos a las épocas históricas del camino, desde los tiempos prehispánicos, hasta hoy.
Cercana las efemérides del quincuagésimo aniversario del departamento, obliga a la duma departamental activar los mecanismos jurídicos, administrativos y técnicos, que permitan el proceso de una Ordenanza, que regule la restauración, conservación, uso y permanencia del camino en el tiempo y espacio.
La honorable Asamblea Departamental está en deuda con el pueblo Quindiano. En uso de sus facultades constituciones y legales, debería procurar la declaratoria como bien patrimonial, y asignar los recursos para su restauración, conservación. Ordenanza que permitirá que el camino del Quindío persista como hito histórico de la Quindianidad.
Álvaro Hernando Camargo Bonilla
Viga del Patrimonio del Quindío.