FILANDIA,
HIJA DEL ANDE.
Filandia
Geografía Histórica de la Provincia del Quindío, Peña Heliodoro 1892, Popayán Imprenta Departamental Pág. 55,56 y 57
"En la vía del Quindío, á tres leguas de Salento, hacia el N.E. de la ciudad de Cartago á cuyo distrito pertenece, se encuentra este Corregimiento.
Habitantes: 4.000.
Su erección en Caserío data de 30 de enero de 1883.
Limites: “Desde el punto de Portachuelo, limite del Distrito de Cartago con el de Salento, una línea imaginaria al punto denominado Angostura en el rio de La Vieja: éste aguas abajo hasta el desemboque de la quebrada Consota: ésta aguas arriba hasta el desemboque de la quebrada Condina: ésta agua arriba hasta el desemboque de la quebrada Tinajas: de allí una línea imaginaria enfrente de Alta-gracia: y de allí otra línea á Portachuelo, su primer lindero.” *
Hállase situada la población cabecera del Caserío en una altiplanicie dela cuchilla-casi en su parte media-que lleva por nombre Novilleros.
Goza de una amena y alegre posición: á un lado domina el valle del Quindío, y al otro los nevados perpetuos de la cordillera, la cual le ofrece tarde y mañana variados é interesantes espectáculos.
De temperatura fría en las alturas, templada en las hoyas, pero generalmente sana y ventilada. Sus producciones son las de los dos climas.
Los terrenos muy fértiles, son propios para la agricultura y para la cría de ganados. Posee algunas fuentes saladas; y produce con especialidad trigo, papas, cebada, habas, alverja, frejol, maíz, plátano, legumbres, etc.
Una plaza rodeada toda de casas, con una Iglesia, una calle principal con bastantes edificios, otras demarcadas y empezadas á poblar, componen la población que se extiende como a unas 80 hectáreas de terreno.
Hay una carnicería donde se degüellan por término medio 16 a 20 reses, mensualmente; una escuela publica, con 80 niños y una privada; un mercado semanal muy importante, establecido cuatro días después de la fundación.
Esta población tiene en expectativa un provenir risueño, pues si en un lapso de tiempo tan corto, cuenta ya crecido numero de habitantes, que le imprimen un buen movimiento comercial y con elementos de progreso, muy en breve será Distrito importante.
Hoy ya es lugar de obligada estación para los viajeros del Quindío, y aquí pueden proveerse de recursos.
Noticia histórica
La fundación se hizo el 20 de agosto de 1878, martes, en que fue escrita y firmada una acta por 102 individuos cabezas de familia, quienes con el propósito de fundar se habían constituido allí con estas, con sus ganados, etc. Figuran entre los primeros los señores Doctor José Ramón López Sanz (principal fundador), Antonio Marín, Severo Gallego, Ramón Peláez, Bonifacio Giraldo, José León, Andrés Vargas C. y Juan de Dios Blandón.
Trae el nombre su origen no del europeo Finlandia, como se ha crido, sino de la palabra latina filius (hijo) y Andes; de suerte que significa: Hijo de los Andes (*)
El señor Don José María Serna, nombrado agrimensor, fue quien en unión del señor López Sanz y otros vecinos, demarco la plaza, calles, solares para Iglesia, cárcel, Despachos públicos y escuelas.
El primer Corregidos fue el señor Rafael Carvajal.
*Estos fueron dados por la misma ordenanza que creó el Caserío (30 de Enero de 1883).
*Tal fue el acurdo de los señores López Sanz, José María Serna, Felipe Meléndez y Gabriel Montaño (Jefe Municipal), á quienes se concedió la designación del nombre."[1]
[1]
Geografía Histórica de la Provincia del Quindío, Peña Heliodoro 1892, Popayán Imprenta Departamental Pág. 55,56 y 57Filandia,
Hija del Ande, Colina sagrada, patrimonio Artesanal de la cestería, territorio habitado
por personas religiosas, amables, sociables, gallardas, y respetuosas, con profuso
arraigo de sus raíces, creencias y tradiciones.
Situada
sobre los estribos de la cordillera de los Andes del Quindío, en su ladera occidental,
donde acceden exuberantes nubes y cristalinas lluvias, alternadas por agradables
tiempos soleados. Colinas proveídas de regios miradores naturales, en donde se
pueden percibir los “patios de indios”, colinas terraplenadas en donde los aborígenes
los Quimbaya, orfebres destacados, construyeron su habitaciones y sitios religiosos.
Aserción que se colige del descubrimiento de la denominada colección Quimbaya,
y/o Tesoro Quimbaya, producto de la acción de la guaquería en los parajes de La
Soledad, Fachadas y Pavas, donde hoy solo quedan las fosas y túneles por donde
ambiciosos e insaciables guaqueros extrajeron piezas orfebres ceremoniales y
que hoy se exhibe en el Museo de las Américas de Madrid, como trofeo de la
nefasta invasión y sometimiento español de los aborígenes Quimbaya.
Filandia
se fundó en un punto del camino del Quindío, denominado “Novilleros”, un contadero,
tambo o posada ubicado en el camino proveniente de Cartago y que conducía a
Ibagué. Fundación tutelada por la dirección política administrativa del Estado
Soberano del Cauca, con Popayán como la capital y Cartago como capital de la
Municipalidad del Quindío, administración que se ejerció hasta el año de1908; tiempo
en que se separó del Cauca, y se integró al efímero departamento de Manizales,
después Caldas, y en el año de 1966, al majestuoso departamento del Quindío.
MONOGRAFÍA
DEL MUNICIPIO DE FILANDIA.
Filandia,
un municipio ubicado en el departamento del Quindío, tiene una rica historia
que se remonta a finales del siglo XIX. Fundado en 1878.
Filandia
ha experimentado una evolución política y administrativa significativa a lo
largo de los años
FUNDACIÓN.
Filandia
se fundó en un punto del camino del Quindío, denominado "Novilleros",
un contadero, tambo o posada ubicado en el camino proveniente de Cartago y que
conducía a Ibagué. La fundación fue tutelada por la dirección política
administrativa del Estado Soberano del Cauca, con Popayán como la capital y
Cartago como capital de la Municipalidad del Quindío.
El nombre
de Filandia no se deriva del país europeo "Finlandia", sino que
proviene de la palabra latina "filius" -hijo- y Andes; de suerte que
significa hija de los Andes. Este fue el acuerdo de López Sanz, José María
Serna, Felipe Meléndez y Gabriel Montano, a quienes se concedió la designación
del nombre.
FUNDADORES.
Entre los
principales fundadores de Filandia se encuentran:
Felipe
Meléndez, natural de Cartago, abogado, gobernador de la provincia del Quindío,
magistrado del Tribunal Superior de Justicia del estado soberano del Cauca.
Gabriel
Montaño, cartagueño de origen humilde, abogado de distinción, profesor, quien
desempeñó diversos cargos de importancia.
José
María Serna, agrimensor, quien en unión del señor López Sanz y otros vecinos,
demarcaron la plaza, calles, solares para el templo, la cárcel, los despachos
públicos y escuelas.
EVOLUCIÓN
POLÍTICA Y ADMINISTRATIVA.
En 1882,
Cartago, capital de la Municipalidad del Quindío, emite el acuerdo número cinco
del 12 de febrero, creando el caserío de Filandia y nombra dos empleados, un
aguacil y comisario de policía. En 1892, se eleva a Filandia a la categoría de
municipio, integrado por los corregimientos de Circasia y Montenegro.
La
Ordenanza 31 de 24 de julio de 1894, crea del distrito de Filandia, entidad
territorial compuesta el corregimiento del mismo nombre, que sería la cabecera
del nuevo Distrito, y el de Circasia, segregándolos de los Municipios de
Cartago y Salento.
DEMARCACIÓN
DE LÍMITES.
La
demarcación de límites entre los municipios de Cartago y Filandia se estableció
en la Ordenanza 31 de 1894. La línea imaginaria que partía del río La Vieja,
pasaba por Pavas y terminaba en la quebrada Barbas, fue establecida como límite
entre los dos municipios.
En 1919,
se nombró una comisión de ingenieros para precisar la línea limítrofe entre los
departamentos de Caldas y Valle del Cauca. La comisión, conformada por los
ingenieros Julio Fajardo Herrera y Julián Arango, presentó un informe al Senado
y a los gobernadores de los departamentos de Caldas y Valle del Cauca, en el
que se establecía la línea limítrofe entre los municipios de Filandia y Alcalá
(antes Corregimiento de La Balsa).
Desde su
fundación en 1878, Filandia ha experimentado cambios significativos en su
estructura política y administrativa, lo que ha llevado a la configuración
actual del territorio colombiano.
LA
FUNDACION.
El
nombre de Filandia no se deriva del país europeo —Finlandia—, como se ha
creído, sino que proviene de la palabra latina “filius” —hijo— y Andes; de suerte
que significa hija de los Andes. Este fue el acuerdo de López Sanz, José María
Serna, Felipe Meléndez y Gabriel Montano —jefe municipal del Quindío—, a
quienes se concedió la designación del nombre.
Sus
principales fundadores Felipe Meléndez, Juez del Circuito, vocal principal de
La provincia de Quindío, el Dr. José Ramón López Sanz, Severo Gallego, Gabriel
Montaño, Bonifacio Giraldo, Eleuterio Aguirre, Laureano Sánchez, Lolo Morales, José
León, Jesús María Osorio, Carlos Franco, Eliseo Buitrago, entre otros más[1]
El
20 de agosto de 1878, al antiguo “Novilleros”, confluían viandantes colonos que
provenían de varias regiones del país como: Antioquia, Boyacá, Cundinamarca,
Tolima Grande y El Cauca. En este lugar paraban para descansar en las noches de
su itinerario, y observando la fertilidad y belleza de las tierras, decidieron fundar
un pueblo, aplicando de inmediato su trabajo y consagración a esta labor.
Erigieron
sus casas de vara en tierra, algunas techadas con iraca, otras con astilla de
madera, (tablillas rajadas de cedro negro y de nogal), clavadas con puntillas
con clavos fabricados de la misma madera.[2]
EL PERFIL SOCIIAL DE
DOS DE SUS FUNDADORES.
Felipe
Meléndez, natural de Cartago, abogado, gobernador de la provincia del Quindío,
magistrado del Tribunal Superior de Justicia del estado soberano del Cauca en
los 3 periodos de 1875-77, 1877-79 y 1881-83.
Gabriel
Montaño, Cartagueño de origen humilde, abogado de distinción, profesor, quien
desempeñó diversos cargos de importancia, jefe político cantonal, alcalde,
consejero municipal, presidente de la municipalidad de la provincia del
Quindío, juez de circuito, diputado a las legislaturas del Estado en 1867, 71 y
72.
José
María Serna, agrimensor, quien en unión del señor López Sanz y otros vecinos,
demarcaron la plaza, calles, solares para el templo, la cárcel, los despachos
públicos y escuelas. El primer corregidor fue el señor Rafael Carvajal.
EN 1892 SE ERIGE EN
DISTRITO Y EN 1894 ES RATIFICADO POR EL ESTADO SOBERANO DEL CAUCA.
En
octubre 7 de 1878, el señor Rafael Carvajal, es nombrado comisario de la
“partida” de “Novillero”, en asocio del señor Emigdio de la Parra. El 30 de
enero de 1882 Cartago, capital de la Municipalidad del Quindío, emite el
acuerdo número cinco del 12 febrero, creando el caserío de Filandia y nombra dos
empleados, un aguacil y comisario de policía (Tomo 31 de 1882 a 1883) y es
nombrado don Rafael Carvajal para ocupar el cargo de Comisario.
La
ordenanza 31 de 24 de julio de 1894, crea del distrito de Filandia, entidad territorial
compuesta el corregimiento del mismo nombre, que sería la cabecera del nuevo
Distrito, y el de Circasia, segregándolos de los Municipios de Cartago y
Salento.
En
1892 se elevó a Filandia a la categoría de municipio, integrado por los
corregimientos de Circasia y Montenegro, pero a poco tiempo fue eliminado. Más
tarde, por la ordenanza 31 de 24 de julio de 1894 la asamblea del Cauca volvió
a crear el municipio, perteneciente a la provincia del Quindío, compuesto del
corregimiento del mismo nombre, su cabecera, y de Circasia, segregándolos,
respectivamente, de los municipios de Cartago y Salento.[3]
En
el año, 1880, en un terreno que concedió la señora Dolores García, se construyó
una capilla, allí ofició la primera misa el padre José Joaquín Baena, cuando
paso por este lugar en su viaje
de Manizales a Bogotá. El cementerio se construyó en un terreno donado por el
señor Gregorio Arango (alias. Sordo) y las
primeras campanas las regaló el señor Gerardo Jaramillo con
el producto de una riña de gallos. Las campanas existentes, Las
campanas existentes fueron donadas por los guaqueros Norberto Ospina (a. casfú)
y Victoriano Arias., con el producto de una gran guaca extraída en el paraje de
la Soledad (varias arrobas de oro). Campanas que fueron fabricadas en Buga, para lo cual se destinaron
tres libras de oro. El Reloj del templo, lo adquirió el clérigo Jesús M.
Restrepo con dinero proveniente de las limosnas de los feligreses.
Rápidamente
se trazaron calles, plazas y parques (“Parque Viejo”), calles como la del
“Empedrado”, del
Pensil, La Real, el Convento, Consistorial, De La Cruz, el Embudo y de La Paz. Filandia
se ensancha rápidamente, se construyen casas en todos sus confines. La primera
casa, en el marco de la plaza, fue la de la esquina de la Calle Real con Calle
Consistorial, hoy local de la Farmacia Bristol.
En
1892 se instala la oficina telegráfica con su primer administrador don Lucas
Ocampo a quien sucedió poco después don Julio Guinand. El primer guarda de la
línea telegráfica fue don Jeremías Serrano.
COMUNIDAD RELIGIOSA BETHLEMITAS.
El
29 de agosto de 1907, el sacerdote Francisco de Paula Montoya, aprovechando la
parada en Filandia de dos religiosas Betlemitas (María de Jesús Ruiz y otra), que
se transitaban de Palmira, con rumbo a Bucaramanga, quienes le solicitaron los
servicios religiosos del padre Montoya, quien después de dialogar con ellas le
manifestó la idea de fundar un colegio en Filandia. La consecuencia de este
dialogo fue el establecimiento de la comunidad religiosa Betlemitas, que
inicialmente fuera dirigida por la madre General María Luisa Salinas.
Álvaro
Hernando Camargo Bonilla.
